martes, 18 de abril de 2017

EL PRISMA SOCIAL DE LA MADRUGÁ




Foto: Alejandro Ruesga, El País.

Pasó la Semana Santa de 2017, atrás quedaron siete días en los que todas las Hermandades pudieron realizar su estación de penitencia a la Santa Iglesia Catedral. El intenso calor y la belleza en el exorno y andar de los pasos fue la nota predominante de unas jornadas muy brillantes, podríamos asegurar que la Semana Santa de 2017 ha sido una de las mejores de este siglo...¿ o quizás no?

Tras las luces, vinieron las sombras, llegó la Madrugá y con ella el mensaje de que...no todo podía ni iba a ser perfecto, una sucesión de carreras y avalanchas sembraron el pánico entre quienes la disfrutaban a cara descubierta, y realizaban con su hermandad la estación de penitencia. Voy a obviar los detalles de lo sucedido, pues todas las informaciones vertidas han sido portada de todos o casi todos los medios de comunicación, para mayor vergüenza de una ciudad que exporta la Semana Santa como uno de sus mayores atractivos turísticos, una fiesta universalmente conocida.

La cuestión a abordar es la necesidad de realizar un análisis sociológico muy profundo. Ya no valen solo las grandes palabras y promesas de que antes del verano se va a diseñar un nuevo dispositivo de seguridad para evitar sucesos tan lamentables como estos, no vale solo la buena voluntad y el compromiso de trabajar juntos por parte del Consejo General de Hermandades y Cofradías, Ayuntamiento de Sevilla y Hermandades del día. Hay que ir mucho más allá, y es que la Semana Santa de Sevilla ha ganado en belleza y patrimonio tanto como ha perdido en valores, convivencia y civismo en las calles. Un año tras otro, vemos calles convertidas en lugares de acampada libre, comederos de pipas, parkings de sillitas y carritos de bebé, que las hace absolutamente intransitables, ha habido más policía y quizás se han relajado algunos aforamientos, pero la distribución de la presencia policial sigue siendo muy deficiente,y no se trata de intimidar o de obstaculizar la circulación de las personas, sino de recordar que la calle es un espacio, amplio o reducido, en el que tenemos que convivir durante siete días, no puede ser el caldo de cultivo para creer que es un espacio privado donde podemos acomodarnos con absoluta impunidad. Todo ello se ve alimentado con una alarmante pérdida de valores, lo cual observamos en el comportamiento de la masa ante el paso de cofradías, el vandalismo ha sido y sigue siendo la guinda que acaba encumbrando el pastel, y todo ello ha quedado reflejado en las avalanchas de la Madrugá. Los vándalos han enfocado la Semana Santa como una de las grandes citas del año para exhibir sus miserias y provocar el caos absoluto en las masas. Evidentemente, la psicosis generada tras los últimos atentados de Londres y Estocolmo han contribuido a prender la mecha, aunque al final todo lo sucedido se haya tratado informativa y políticamente como hechos aislados provocados por cuatro gamberros,y es ahí donde está el peligro, en querer simplificar un gravísimo problema que hemos padecido, en mayor o menor medida, durante cinco años, por lo que ha llegado el momento de decir ¡¡BASTA YA!!

¿Tendremos que ver un muerto en la calle para afrontar y erradicar definitivamente la lacra que está degradando nuestra Semana Santa? ¿Qué medios son necesarios para garantizar a público y hermandades la máxima seguridad? todas estas preguntas flotan en el aire sin recibir a cambio una respuesta contundente y convincente. Desde el Consejo General de Hermandades y Cofradías, con Joaquín Saínz de la Maza a la cabeza, abogan por tomar medidas que "seguramente no llegaremos a entender", ¿estaremos hablando de controles de acceso y aforamientos masivos como si de un estado policial se tratara? ¿estarán dispuestas todas las instituciones educativas y administrativas de la ciudad a convocar una mesa de trabajo y arrancar un compromiso firme y duradero a quienes la gobiernan para darle una vuelta de tuerca a este asunto?

Mientras tanto, todos debemos asumir un compromiso y luchar contra quienes no tienen ni quieren otro modo de vida que no sea perturbar nuestra convivencia, entre todos debemos recuperar aquella Semana Santa que nos enseñaron nuestros padres, aquellos valores educativos de los 70, 80, recuperar la ilusión y el entusiasmo que provocaba el paso de las cofradías por determinados lugares a los que ahora se teme por la acción de los vándalos. Enseñemos a nuestros hijos a amar nuestras tradiciones,a concienciar a los demás de que, si no les gusta la Semana Santa, Sevilla ofrece muchas y variadas propuestas de ocio al margen de los desfiles procesionales, debemos fomentar la tolerancia y el respeto para todo y para todos, seamos o no cofrades, creamos o no en Dios y en su bendita madre. Nos jugamos mucho de cara al futuro, esta batalla debemos ganarla entre todos.

Ángel Trianero

2 comentarios:

  1. Partiendo de la base de que los echos acontecidos en la Madruga Sevillana,no se pueden volver a repetir nunca mas y hay que buscar soluciones, creo los arboles no nos dejan ver el bosque.Cosas que solucionar en la Madruga hay muchos , pero cada parte debe arreglar los que esta en su mano , desde que sucedieron en el año 2000 unos echos similares a los de este año , todo cofrade Sevillano tenia la certeza de que se repetirian y ya se han repetido , ahora nos rasgamos las vestiduras por lo sucedido .Hace 17 primaveras las autoridades cerraron el caso diciendo que no habia pasado nada , que todo se debio a una serie de acontecimientos que sucedieron en forma y lugar desafortunados, nos trataron como tontos,cuando todos sabemos y sospechamos que hay culpables de lo sucedido aquel dia.
    Mi humilde opinion es que todas las autoridades civiles,politicas,responsables eclesiasticos y hermandes de esta bendita ciudad llamada Sevilla,la unica teoria que no les vale esta vez es la misma del año 2000,porque los dejaria con el culo al aire, eso significaria que durante 17 años se han dedicado a parchear y no a coger al toro por los cuernos y ahora a sido el toro el que los a cogido a ellos,porque esto iba a pasar y ya a pasado,si quieren que no vuelva a suceder ya estan tardando en ponerse a trabajar, pues ya quedan apenas 340 dias para una nueva Madruga y poner de acuerdo a los señores Hermanos Mayores de las Hermandades que procesionan en la Madruga no es nada facil y seguramente les faltara tiempo.En caso contrario espero que las autoridades civiles y politicas hagan su trabajo que seria imponer un orden y un criterio logico para la seguridad de los ciudadanos .
    En el tema del incivismo y mal gusto , totalmente de acuerdo pero eso no es un problema cofrade es un problema de esta sociedad mucho mas dificil de atajar .


    ResponderEliminar
  2. Partiendo de la base de que los echos acontecidos en la Madruga Sevillana,no se pueden volver a repetir nunca mas y hay que buscar soluciones, creo los arboles no nos dejan ver el bosque.Cosas que solucionar en la Madruga hay muchos , pero cada parte debe arreglar los que esta en su mano , desde que sucedieron en el año 2000 unos echos similares a los de este año , todo cofrade Sevillano tenia la certeza de que se repetirian y ya se han repetido , ahora nos rasgamos las vestiduras por lo sucedido .Hace 17 primaveras las autoridades cerraron el caso diciendo que no habia pasado nada , que todo se debio a una serie de acontecimientos que sucedieron en forma y lugar desafortunados, nos trataron como tontos,cuando todos sabemos y sospechamos que hay culpables de lo sucedido aquel dia.
    Mi humilde opinion es que todas las autoridades civiles,politicas,responsables eclesiasticos y hermandes de esta bendita ciudad llamada Sevilla,la unica teoria que no les vale esta vez es la misma del año 2000,porque los dejaria con el culo al aire, eso significaria que durante 17 años se han dedicado a parchear y no a coger al toro por los cuernos y ahora a sido el toro el que los a cogido a ellos,porque esto iba a pasar y ya a pasado,si quieren que no vuelva a suceder ya estan tardando en ponerse a trabajar, pues ya quedan apenas 340 dias para una nueva Madruga y poner de acuerdo a los señores Hermanos Mayores de las Hermandades que procesionan en la Madruga no es nada facil y seguramente les faltara tiempo.En caso contrario espero que las autoridades civiles y politicas hagan su trabajo que seria imponer un orden y un criterio logico para la seguridad de los ciudadanos .
    En el tema del incivismo y mal gusto , totalmente de acuerdo pero eso no es un problema cofrade es un problema de esta sociedad mucho mas dificil de atajar .


    ResponderEliminar